Marzo 2023

sábado, 31 de marzo de 2012

Apuntes sobre los aborígenes canarios

Enmarque del Tema
Antes de que las Islas fueran conquistadas, el pueblo guanche, de raza blanca y con rasgos tanto cromañoides como mediterranoides, era el que las poblaba. Éste era un pueblo de pastores, pacífico, enemigo de la injusticia y la crueldad, y amante de la libertad, hasta el punto de preferir la muerte antes que someterse al mandato de los conquistadores.
Estos antiguos pobladores vivían en cuevas, con un estilo de vida sencillo y rudimentario. De ahí que exploten al máximo los recursos naturales como la piedra y el barro, elaborando útiles y ornamentos. Del mismo modo, hacen uso de la madera para sus armas y de la piel de las cabras para confeccionar pieles con las que cubrirse.
En lo que respecta a su organización política y social, la tierra era común a todos, siendo su máxima autoridad el mencey o guanarteme, asesorado por sus consejeros.
De la lengua que hablaban, hoy en día se conservan escasas palabras, tan sólo algunos topónimos y expresiones populares.
En cuanto a sus creencias, era un pueblo primordialmente monoteísta y tenían la costumbre de embalsamar a sus muertos.
La población prehispánica: Los Guanches
SOBRE LA PALABRA «GUANCHE»
Lo primero que hay que aclarar es que la palabra “guanche” la aplicamos a todos los antiguos habitantes de las Islas Canarias. Bien se sabe que su empleo correcto sólo se refiere a los antiguos habitantes de Tenerife, pero ya es uso generalizado el aplicarlo a todas las islas, además de resultar de más comodidad de entendimiento. El uso del término "guanche" para referirse a la totalidad de los aborígenes del Archipiélago data de finales del XVIII y del siglo XIX, dado que muchos investigadores centraron sus estudios sobre los antiguos habitantes precisamente en los aborígenes de Tenerife.
Algunas veces también solemos referirnos a los antiguos habitantes con la denominación de «prehispánicos», por ser anteriores a la llegada de los españoles.
LOS GUANCHES
El término “guanche”, se emplea en la actualidad, para hacer referencia a todos los aborígenes canarios. Sin embargo, esta palabra hacía referencia únicamente a los antiguos pobladores de Tenerife (concretamente quiere decir “hombre de Tenerife”, procediendo de “guan” descendiente y “chinech” Tenerife). El uso generalizado de este vocablo data de finales del siglo XVIII y del XIX, en esta época muchos investigadores centraron sus estudios sobre los aborígenes canarios, en Tenerife. En los últimos tiempos, para denominar a los primeros habitantes de las islas, se ha ido sustituyendo el término guanche por el de “indígena”, que hace referencia a los originales pobladores de un lugar.
Por otro lado “Guanche”, se denomina también al idioma de origen líbico que hablaban los antiguos pobladores de Canarias. Este lenguaje desapareció tras la conquista, conservándose en la actualidad sólo una serie de palabras recogidas por cronistas e historiadores. Algunos de estos términos se han mantenido colándose en el actual habla canaria, como por ejemplo “baifo” para referirse a la cría de la cabra o “gofio” que hace referencia al grano tostado y molido. Del mismo modo, existen también términos guanches en algunos topónimos de las Islas como Aguere, Chipude, Gáldar, Tijarafe, Tamaduste, Yaiza o Tindaya.
Cuando llegaron los conquistadores, quedaron admirados del aspecto físico, de sus costumbres y de las virtudes de los guanches. ¿Eran de piel morena? ¿Eran un pueblo guerrero? ¿Vivían en una civilización avanzada? ¿Eran cultos? ¿Y religiosos? ¿Conocían los metales? ¿De qué se alimentaban?

En la mentalidad popular es imaginado el guanche haciendo sonar el bucio como señal de llamada.
En los relatos de los antiguos aparecen como hombres altos, robustos, fuertes, de bellas facciones; de tal manera que los cronistas de la expedición de Bethencourt exclaman: «ld por todo el mundo y casi no hallaréis en ninguna parte personas más hermosas ni gente más gallarda que la de estas islas, tanto hombres como mujeres, además de ser de buen entendimiento si hubiese quien los cultivase».
Aislados de la influencia cultural de otros pueblos, vivían en pleno neolítico.Desbastaban la piedra obteniendo ruedas de molino, esferoides arrojadizos, cuchillos de obsidiana, etc. Modelaban el barro en la construcción de vasijas y cuencos.Elaboraban punzones, espátulas y agujas de hueso, armas y bastones de madera.
Su sistema de vida era fundamentalmente pastoril, aunque también hacían faenas agrícolas en el cultivo de la cebada y el trigo, que tostaban y molían, obteniendo la harina de gofio.
¿Dónde vivían? ¿Existía entre ellos algún tipo de organización política y social? ¿Se divertían?

Cuando llegaron los conquistadores, se encontraron con un pueblo noble, valiente y defensor de su libertad.

Las condiciones volcánicas del terreno posibilita cuevas y oquedades, que los guanches usaron como vivienda y como depósito funerario.
Vivían fundamentalmente en cuevas, aunque también construían chozas. Se vestían con pieles. No hay señales de que conocieran la navegación.
Todas estas características se refieren al estilo cultural básico, común de todas las islas, pues existían asimismo otros modos de vida más avanzados, como en Gran Canaria, a causa de inmigraciones más tardías a los primeros pobladores.
Estaban organizados bajo el mandato de un mencey o guanarteme (rey); la tierra era común; eran pacíficos aunque guerreaban, como todos los pueblos pastores, por robos o problemas de ganados. Tenían leyes y jueces. Creían en un solo Dios que adoraban e imploraban en lo alto de las montañas. Embalsamaban a sus muertos. El tajaraste era uno de sus bailes y la lucha bipersonal (antecedente de la lucha canaria) era su principal deporte.
¿Qué opinaban los conquistadores de ellos?
Cuando llegaron los conquistadores, se encontraron con unos hombres nobles, valientes y defensores de su libertad, como pocos pueblos en el pasado. Eran enemigos de la crueldad.El papel de carnicero era despreciado. Sin embargo tuvieron que luchar tenazmente por defender la libertad de su patria.Sus armas eran rudimentarias pero la lucha no fue fácil para los conquistadores. La Conquista comenzó en 1402 y terminó en todas las islas en 1496, casi un siglo de conquista. Y cuando ésta terminó, o cuando algunos de los guanches eran deportados como esclavos, preferían morir, despeñándose
o no tomando alimentos, que perder su libertad. En 1496, casi un siglo de conquista. Y cuando ésta terminó, o cuando algunos de los guanches eran deportados como esclavos, preferían morir, despeñándose o no tomando alimentos, que perder su libertad.
Este gesto de honor y valentía, que llegó a maravillar a los propios conquistadores, continúa resonando en la Historia como el testimonio de un pueblo grande, que odiaba el sufrimiento, la esclavitud y amaba la libertad.
Características Raciales
ESTUDIOS ANTROPOLÓGICOS
Este tema sólo es interesante desde la perspectiva de la curiosidad histórica, pero en modo alguno puede serlo desde valoraciones raciales. Entre otras cosas, porque la raza no supone nada si no es desde las influencias ambientales y culturales.
En relación con esa curiosidad, desde finales del siglo XIX, Canarias ha venido siendo zona de atracción para los antropólogos. Si muchos científicos se han interesado por Canarias, la causa primera fue el hombre canario, especialmente el antiguo habitante de Canarias, el guanche. La abundancia de restos a causa del enterramiento en cuevas, la conservación de los mismos, debido al sistema de momificación, la particularidad de tales, por el descubierto paralelismo con la raza CroMagnon... ha provocado que muchos antropólogos físicos, extranjeros en su mayoría, vinieran a Canarias interesados por su estudio.
¿Todos los guanches eran cromañoides?
Cráneos guanches comparados con una copia de uno de los originales de la estación de CroMagnon.
Muchos de los sistemas elaborados están hoy superados, pero conviene conocerlos, ya que, de los sistemas tipológicos de Verneau (1879), Vos Luschan (1896), E. A. Hooton (1916), E. Fischer (1926); Frédérik Falkenburger (1942) e Ilse Schwidetzky (1975), se pueden sacar las siguientes observaciones:
1.º —En todas las clasificaciones aparecen varios grupos raciales.
2.º —En todas las clasificaciones aparece una constancia y predominio de dos tipos: el tipo cromañoide y el tipo mediterranoide.
3.º —Los estudios más modernos y exhaustivos correspondientes a Ilse Schwidetzky (2.023 cráneos y 2.060 huesos largos) vienen a confirmar la bipolaridad cromañoide y mediterranoide.
4.º —Los estudios de la misma autora en la población viva, sobre 6.714 escolares repartidos por las siete islas (44), también llegan a la misma conclusión, es decir, la presencia de una doble tipología bipolar, tanto para la población aborigen como para la actual.
En los estudios realizados en el Archipiélago, el tipo cromañoide y el mediterranoide son los predominantes. ¿Qué peculiaridades presenta cada uno de ellos?
La bipolaridad de ambos tipos resulta a causa de que el cromañoide es de cara ancha y robusta y el mediterranoide de cara alta y delicada. El primero es de cráneo largo y estrecho (dolicocéfalo) y el segundo de cráneo corto y ancho (braquicéfalo).
En cuanto a la estatura, el cromañoide queda por debajo del mediterranoide. El grupo sanguíneo dominante era el tipo «0» en los cromañoides.
Estos dos tipos fundamentales se encuentran también en las poblaciones prehistóricas del Noroeste africano, probable área de procedencia de los primitivos canarios, aunque no presentan de forma absoluta las mismas características.
¿Sigue existiendo esta bipolaridad en la población canaria actual?
A pesar de que el tipo cromañoide y mediterranoide en cierta medida estuvieron mezclados antes de la Conquista y de que después de ésta hubo mayor mezcla, especialmente entre conquistadores y conquistados, los estudios de la mayoría de los científicos abogan por la pervivencia de la raza prehispánica en la actual población canaria, tal como Ilse Schwidetzky demuestra al comparar la población aborigen como la actual.
Estadísticamente ha conseguido una cadena de factores o características para cada uno de los tipos, basados en los 6.714 escolares canarios investigados.
Exponemos a continuación esas características que marcan la bipolaridad tipológica:
Muchos de estos aspectos no se pueden generalizar. Así tenemos que los cromañoides que tenían fama de más altos, aparecen como más bajos que los mediterranoides. Este es el caso de los cromañoides gomeros y de los cromañoides de las zonas altas de Tenerife y de Gran Canaria. Pero esto no ocurre siempre, porque tenemos, por ejemplo, a los actuales cromañoides del Sur de Tenerife, que sobresalen por su estatura y sobrepasan a los habitantes del Norte. Por el contrario, antes de la conquista los habitantes del Sur eran más pequeños que los cromañoides del Norte.
Lo mismo se puede decir respecto al color de los ojos, de la piel y del cabello. Los cromañoides tienden a tenerlos más claros o más rubios que los mediterranoides, pero esto especialmente en los pueblos de la montaña.
LA HERENCIA GUANCHE
Un estudio del Departamento de Genética de la Universidad de La Laguna, realizado sobre 652 personas de todas las islas, revela que, genéticamente, la herencia guanche persiste en la actual población canaria. Concretamente, existe de un 30% a un 40% de influencia genética aborigen por vía materna y un 10% por vía paterna. Esto está en consonancia con el modo en que se produjo la Conquista de las Islas, donde hubo más supervivencia de mujeres aborígenes y donde los conquistadores fueron fundamentalmente varones.
El origen de los Guanches
Han existido diferentes opiniones acerca del origen de los guanches. Unos les han atribuido origen egipcio, otros, cartaginés o vikingo, otros, un paralelismo con los vascos, otros, hasta un origen autóctono como restos del pueblo que habitó la desaparecida Atlántida.
La teoría hoy más dominante, y con más pruebas científicas, es que los primeros pobladores eran cromañoides y proto-mediterranoides, procedentes del Norte Occidental de África.
Esto nos lleva a plantearnos distintas preguntas: ¿Cómo llegaron estos pueblos al Noroeste africano? ¿Por qué pasaron a Canarias? ¿Qué influencias culturales arrastraban? Empecemos viendo cuál es el origen de esta antigua raza guanche.

La teoría más aceptada es que los aborígenes canarios procedían del territorio noroccidental del continente africano.
Por el estado cultural de aislamiento en que estaban las islas de Tenerife y La Gomera hasta la llegada de los conquistadores (S. XV), se ha podido deducir que este tipo cultural, llamado «esencial isleño» o «de sustrato» y que ha sido común a todo el Archipiélago, es el correspondiente al primer pueblo poblador. Se trata de un pueblo pastor, con una cultura neolítica elemental, que vivía y enterraba a sus muertos en cuevas. Sus vasijas de fondo cónico con poca decoración, sus tabonas, sus molinos de piedra y algunas armas de madera constituían los elementos más distintivos de su cultura. Así parece que también vivía en la zona del Magreb (Marruecos, Argelia).
Con este bagaje cultural llegaron a Canarias. Pero, ¿quiénes llegaron primero? ¿Los cromañoides o los mediterranoides? En el NO africano convivían ambos tipos y no es raro que pasaran a la vez. ¿Cuál es el origen remoto de estos pueblos?
¿Qué motivos llevaron a estos pueblos a emigrar a Canarias?
El primer pueblo poblador de la Islas era un pueblo fundamentalmente pastor.
El área noroccidental de África era lo más lejano a las posibles influencias culturales que generalmente venían de Norte a Sur y de Este a Oeste. Tal zona era una especie de isla cultural, que conservaba los elementos más arcaicos sin recibir influencias avanzadas. Esto da lugar a un fenómeno que se suele conocer con el nombre de «marginación cultural», en cuanto que conserva elementos arcaicos de otras áreas, mientras en estas áreas de origen, tales elementos han desaparecido.
Esta cultura elemental y arcaica es la que va a pasar a Canarias y va a constituir la llamada «cultura de sustrato». Y Canarias se va a convertir, a su vez, en una zona todavía más aislante y conservadora —zona de refugio y marginación— de los posibles elementos culturales.
¿Cuándo?
La fecha que se ha solido dar para la llegada de estos primeros pueblos pobladores ha sido, según unos, a partir del 2.500 a. de C.; para otros, a partir del año 1.000 a. de C. Hasta ahora, las fechas más lejanas obtenidas con el Carbono 14 sólo nos remiten a los años en torno a la Era Cristiana (13). Las dataciones más antiguas conseguidas son del siglo III a. de C. Álvarez Delgado, basándose en los textos de Plinio, considera que las Islas fueron pobladas en el último cuarto del siglo I antes de Cristo (Anuarios de Estudios Atlánticos, 1977).
¿Por qué?
La razón de emigrar estos pueblos del Continente a Canarias, algunos la han visto como provocada por la desecación del Sahara. Según la teoría de Álvarez Delgado, fue poblada por Juba Il de Mauritania, por mandato y consentimiento del Emperador Augusto.
¿Cómo?
La forma de arribar sigue siendo misteriosa, pues todavía no se han descubierto señales en ninguna de las islas de que los guanches conocieran la navegación. Y resulta más extraño sabiendo que varios pueblos recalaron en las costas canarias en épocas sucesivas. El historiador Torriani es el único que habla de barcos construidos con troncos de dragos y con velas de palma, refiriéndose a los de Gran Canaria (51). De todas maneras tuvieron que haber conocido una embarcación, aunque rudimentaria, para llegar a las islas.
Según la teoría de Álvarez Delgado, estos pueblos fueron transportados para poblar las islas.
¿Cómo fueron llegando? ¿Todos a la vez? ¿A todas las islas al mismo tiempo?
Procedencia de los primeros pobladores del Archipiélago. El trazo negro indica la procedencia y recorrido de la raza cromañoide hasta llegar a Canarias. El trazo rojo, el de la raza protomediterranoide.


Principales inmigracios prehispánicas
A excepción de Tenerife y La Gomera, donde se mantiene con gran pureza la cultura propia de los primeros pobladores, el resto de las islas se ven invadidas, unas veces con lucha y otras veces sin ella, por diferentes pueblos y sus correspondientes culturas, fundamentalmente por inmigraciones del continente africano, tanto de la zona del Magreb (Marruecos y Argelia) como del Sahara.
Trataremos de simplificar las principales oleadas culturales por motivos didácticos, ya que es ésta una cuestión todavía confusa y opinable.
¿Qué conocemos con el nombre de “cultura de sustrato”?
Útiles de molienda. Muela superior de molino con decoración radial.
Cultura de sustrato, característico del primer pueblo poblador (pastoreo; vivienda y enterramientos en cuevas; molinos de manos; cerámica de fondo cónico casi lisa; etc.). La fecha de llegada se ha señalado entre el 2500 y el 1000 a. de C., pero esta fecha sólo es válida de acuerdo con las características culturales.
Habría que plantear si esta cultura primera no estaría formada por distintas tribus con ciertas diferencias culturales que se fueron mezclando en distintos tiempos. Si, por ejemplo, en La Gomera no se encuentra, como hasta ahora no se ha hallado, ninguna prueba de momificación de los cadáveres, y en Tenerife y Gran Canaria sí, a pesar de estar incluidas todas las islas dentro de la cultura de sustrato, es claro que las recaladas han sido en distintos tiempos o por distintas tribus.
Esta primera arribada está dominada por gente de tipo cromañoide. Lo que no sabemos es si, al mismo tiempo o después, llega el tipo protomediterranoide.
¿Qué otras oleadas culturales llegaron al Archipiélago?
Elementos culturales saharianos. Ello lo atestigua cierta cerámica palmera, unas placas ovales de concha en Fuerteventura, los machacadores de mortero en Gran Canaria, etc. Sabemos que estas inmigraciones son posteriores a la «cultura de sustrato», puesto que no se dan en Tenerife y en La Gomera.
Cultura de los ídolos. Parece una corriente cultural que coge las islas de NE a SO (Lanzarote, Fuerteventura, Gran Canaria y El Hierro), pero es Gran Canaria el gran centro receptivo. El tipo de los ídolos muestra muchas influencias del neolítico mediterráneo y se encuentran algunas coincidencias en el Continente africano.
El tipo racial es mediterranoide y, en Gran Canaria, concretamente, ocupa la zona de la costa norte y este.

Ídolo de Tara. Figura femenina realizada en barro cocido. Telde, Gran Canaria.
Elementos culturales atlántico-europeos. Hay una serie de datos en la isla de La Palma que hacen sospechar esa relación con las culturas de la Edad de Bronce del occidente europeo. De los más significativos son los grabados en piedra (petroglifos) con forma de espirales y meandros que abundan por distintas zonas costeras de la isla. Así como los «bastones curvos» y algún tipo de cerámica, junto a una serie de costumbres que los cronistas nos han dejado.
Por otra parte es muy lógico que esto ocurriera en La Palma, dado que es la isla más noroccidental y, por lo tanto, con más posibilidades de comunicación con el mundo atlántico europeo.
También se ha confirmado la influencia de otra cultura, la de túmulos y casas. ¿Qué huellas han quedado?
Detalle de la estructura central del Túmulo situado en Gáldar, Gran Canaria.
Cultura de túmulos y casas. Entre el siglo Vl y IX después de Cristo aparecen nuevas inmigraciones, especialmente en la isla de Gran Canaria. Se ha comprobado la fecha por el Carbono 14 en algunos de sus enterramientos. Se supone que la causa de esta huida del continente africano al Archipiélago se deba a la invasión de aquella zona por los árabes.
Lo que más destaca culturalmente en esta inmigración son los enterramientos en túmulos (formados por amontonamientos de piedras que cubren la cista donde va depositado el cadáver) y por la construcción de casas con plantas cuadrangular, cruciforme, etc.
En las investigaciones de la población actual se confirma la pervivencia del tipo racial de esta cultura de los túmulos en la zona del noroeste de Gran Canaria (San Nicolás, Agaete...), que se destaca por presentar un tipo africano de color oscuro, nariz ancha, labios gruesos, cara alta y redondeada, pero de ninguna forma se trata de un tipo negroide (44).
Por todo lo visto, Canarias se ha convertido en la estación terminal de muchos pueblos, llegando a constituir un auténtico mosaico étnico. ¿Qué elementos o aspectos dan testimonio de esa diversidad?

Canarias, refugio de razas y culturas
Parece que Canarias fuera zona de refugio y conservación de viejas razas y culturas, pues dada su situación de relación con el mundo euroafricano ocupa la situación más extrema, al tiempo que su condición insular ha servido para aislar y conservar las razas y culturas que llegan.
Muchas de las arribadas a Canarias parecen provocadas por necesidades en el cercano continente (desecación del Sahara, invasión de árabes, etc.), pero la mayoría de las recaladas hay que considerarlas debidas al azar, a causa de temporales o por haber perdido el rumbo. No hay que olvidar, así mismo, la dificultad en las llegadas y en el retorno que presentan las costas canarias y que ha sido otra de las causas de la acentuación de ese aislamiento y la consecuente conservación de culturas arcaicas y diversas.
Si hiciéramos un análisis de los distintos elementos que componen la cultura guanche, nos encontraríamos con procedencias de zonas diversas y lejanas. Veamos algunos casos:>—La lengua, aunque emparentada con el bereber, conserva elementos de un más estrecho contacto prehistórico con el líbico.(5)(6)
—El molino de mano y la cerámica de fondo cónico tiene su réplica en Argelia y Marruecos.
—Las cuentas de collar de barro cocido que tienen una dispersión desde el Egipto predinástico hasta el Mediterráneo y las Islas Británicas, llegan a Tenerife con casi exclusión de las otras islas.
—La lucha canaria y la momificación de los cadáveres parece ser también de influencia egipcia.
—Cierta cerámica decorada de La Palma, placas ovales de concha de Fuerteventura, machacadores de mortero de Gran Canaria, tienen su paralelismo en el área del Sahara.
—Los grafismos de El Julan de El Hierro coinciden en un 90% con los del Gran Atlas. También aquí se han encontrado técnicas de momificación de los cadáveres.
—Los ídolos parecen hacer alusión al Egeo y otras zonas mediterráneas.
—Los grabados palmeros, los «crosses» o bastones curvos y otros elementos nos hablan de Irlanda, Escocia, NO de la Península Ibérica...
Después de haber descrito los distintos pueblos e influencias culturales que llegan a Canarias, podría dar la impresión de que la Canarias prehispánica era un desconcertante aglomerado de razas y culturas, sin mantener una identidad común o general. Sin embargo, ¿qué conclusiones finales podríamos obtener?
Inscripciones ideográficas de El Julan, El Hierro. No son letras, sino dibujos simbólicos.
1º.—Fueron múltiples las inmigraciones e influencias culturales de otros pueblos.
2º.—Los distintos grupos se van haciendo préstamos culturales y se obtiene cierta fusión o similitud.
3º.—Sin embargo, sabemos que, por ejemplo en Gran Canaria, a la hora de la conquista y colonización en el Siglo XV, la asimilación de culturas no se había producido totalmente. Así lo explica Diego Cuscoy al señalar que «persisten los poblados de cuevas junto a los poblados de casas y los enterramientos, también en cuevas, en vecindad con enterramientos en túmulos; una cerámica neolítica al lado de otra de variada tipología y bella decoración pintada. Los ejemplos se multiplican. Este hecho se repite, si bien con menos brillantez, en Lanzarote y Fuerteventura» (14).
4º.—Con todo, hay un elemento común y dominante en todas las islas, protagonizado especialmente por la raza cromañoide y representado por la cultura «esencial isleña» o «cultura de sustrato», de tal forma que a pesar de la diversidad cultural estudiada, en el conjunto del Archipiélago se aprecia fácilmente ese estilo guanchesco.
 Pervivencia del guanche en el actual pueblo canario
¿DESAPARECIÓ LA RAZA GUANCHE?
Se llevó a cabo la conquista en el siglo XV y los españoles se fusionaron con el pueblo guanche dando lugar al actual pueblo canario... Pero la base fundamental de este pueblo canario, según datos antropológicos e inferencias históricas, sigue siendo principalmente guanche.
Sin embargo, llama la atención que la mayoría de la población canaria actual tenga nombres y apellidos castellanos. Se debe a que al bautizarles solían ponerles el nombre y apellidos de los padrinos que eran conquistadores. Apellidos con denominación guanche sólo conservan los descendientes de menceyes y guanartemes, como son Doramas, Bencomo, etc.
A pesar de la exportación de esclavos, a pesar de los muertos en la conquista y después de la conquista, Fischer en 1930, Fusté en 1959, V. Rösing en 1967 y otros han defendido que la población prehispánica sobrevive en la población actual de las islas. Wolfel (1930) calculaba que dos tercios, aproximadamente, de la población canaria a finales del siglo XVI era descendiente de indígenas.
Las conclusiones definitivas han sido las de llse Schwidetzky (1975), que en su investigación estadística con escolares, comparándolos con medidas de restos prehispánicos, confirma la pervivencia clara de la antigua población en la actual, aunque con ciertas modificaciones según las islas y las zonas dentro de cada isla (44).
Aunque el tipo cromañoide no era el único tipo racial que dominaba en la época prehispánica, pues hemos visto que en la misma proporción dominaba el mediterráneo, nos fijaremos sólo en el primer tipo porque es el que se puede diferenciar de cualquier influencia inmigratoria.
En todas las islas existe pervivencia guanche, pero… ¿hay en unas más que en otras?
PERVIVENCIA SEGÚN ISLAS
La época prehispánica de La Palma, Lanzarote y Fuerteventura no fue estudiada por contar con escasos restos humanos.
De todas las islas, es La Gomera la que más conserva una población cromañoide. También lo era en la época prehispánica. El Hierro es el que menos conserva, y eso que ocupaba el segundo lugar en la época prehispánica. Tenerife ha aumentado ligeramente la proporción del tipo cromañoide sobre el mediterranoide en relación con la época prehispánica. Lo mismo le ocurre a Gran Canaria, sólo que ésta tenía en aquella época mayor proporción mediterránea.
PERVIVENCIA SEGÚN ZONAS
En general, domina el estrato más antiguo, de tendencia cromañoide, en las zonas geográficamente aisladas y económicamente menos favorecidas. La endogamia, o casamiento entre miembros de la misma localidad, que se da en estas zonas, condiciona la conservación de la tipología racial más antigua. En las islas occidentales es mayor la endogamia que en las islas orientales. Por ello se conserva mejor el estrato arcaico o rasgos cromañoides.
En Tenerife y en Gran Canaria domina la tipología prehispánica más en el Sur que en el Norte, en los pueblos de «los altos» que en los pueblos costeros.
Hay que señalar algunas características específicas de la costa oeste de Gran Canaria:
Se conservan hoy día los rasgos tipológicos de la población prehispánica, correspondiente a la «civilización de los túmulos». Llamada así por el tipo de enterramiento. Se trata de una población prehispánica relativamente reciente (SS. Vl al IX d. de C.), que muestra una estampa más «africana», pero de ninguna forma con características negroides.
En La Gomera, las características cromañoides más puras dominan en las zonas donde no se cultivan plátanos (Chipude, Alajeró, Arure).
En La Palma se conserva mejor en el aislado Noroeste (Garafía, Puntagorda). Rasgos de hondura ocular, prominencia de los pómulos y cabellos más claros se dan en el Puerto Tazacorte.
En Lanzarote se mantienen en la mitad Norte (Tinaja, La Vegueta, Teguise, Soo, San Bartolomé y Haría), aunque en este caso no está justificada la suposición general, de encontrarse en zonas aisladas y pobres.
Todo esto no quiere decir que el resto de la población no siga teniendo una base prehispánica, tanto cromañoide como mediterránea. El nuevo pueblo canario está montado sobre esta base, condicionada por la influencia y mestizaje con los conquistadores. Todo ello le confiere unos rasgos físicos y culturales propios.
A pesar de que las inmigraciones son más comunes hoy en día, el viajero que llega a Canarias tiene una imagen fisonómica del habitante de estas islas. ¿Cómo es ésta?
Gráfica de pervivencia según islas. Comparando el tipo cromañoide y mediterranoide en relación a la población prehispánica y actual, vemos que en Gran Canaria predominaba y predomina, aunque en menor escala, el tipo mediterranoide; en Tenerife sobresale el cromañoide, y más en la actualidad; El Hierro ha pasdo del dominio cromañoide en la época prehispánica al mediterranoide de hoy; La Gomera, la más cromañoide, sigue siéndolo aunque en menor medida (Fuente Ilse Schiwidetzky, 1975).
Estos rasgos diferenciadores deducidos por el viajero suelen generalmente coincidir con los obtenidos por la Dra. Ilse Schwidetzky al comparar alumnos de padres peninsulares con los de padres canarios. Esta investigación estadística sólo es hecha en relación con Gran Canaria y Tenerife. Los resultados principales vienen a ser que los canarios destacan por tener:
—Caras anchas y cortas.
—Pómulos muy salientes.
—Barbillas angulosas, no redondeadas y con el mentón poco saliente.
—Narices pequeñas, más anchas que altas con tendencia a lo cóncavo (algo respingonas, difícilmente se encuentran narices largas, afiladas, convexas o puntiagudas).
—Ojos profundos e inclinados (los extremos exteriores más altos que los interiores).
Cejas más curvadas, menos horizontales.
—Ojos más claros y cabello más oscuro.
—Mayor profusión y complicación de las huellas digitales.
Hay aspectos que sólo destacan en una de las dos islas. Por ejemplo, los grancanarios son más altos que los peninsulares. Los tinerfeños son más dolicocéfalos (cráneos proporcionalmente más largos que anchos).
Sin embargo hay una serie de características no significativas o no señaladas en la investigación que el viajero si parece intuir; por ejemplo, observa entre los canarios:
—Bocas grandes.
—Labios gruesos.
—Ojos grandes y expresivos, que llaman terriblemente la atención por su viveza.
—Dientes grandes y muy blancos.
—Cabello rubio en muchos niños.
Se puede observar características cromañoides en estos individuos: caras anchas y cortas, pómulos salientes, alargamiento del cráneo (dolicocefalia), etc.
 Viviendas, sepulcros, construcciones públicas y mobiliario
VIVIENDAS
Cuevas y Chozas
Eran fundamentalmente cuevas naturales. El terreno volcánico de Canarias facilitaba ese tipo de vivienda. Sus lugares preferidos son los acantilados y los márgenes de los barrancos, con preferencia cerca de la desembocadura. Se puede decir que llegan a formar verdaderos poblados.
La vida de la familia o del grupo se hacía a la entrada, en lugar iluminado y aireado. Ahí se encuentra el «fogal», con tres piedras, a fin de que el humo no penetre en el interior. Solían construir un muro a la entrada para mejor protección, dejando un hueco para el paso.
En las montañas los pastores construyen para la época estival cabañas y abrigos aprovechando las paredes del terreno. Hay que pensar que la vivienda en choza era también construida en la costa, aunque la cueva reúne una serie de ventajas para ser preferida sobre la choza: mayor consistencia, más fresco en el verano y más calor en el invierno.
Cueva de Los Cabezazos, Bco. del Agua de Dios (Tegueste).
¿Las casas de todas las islas eran iguales? ¿Cómo eran las viviendas de las islas orientales? ¿Presentaban alguna característica peculiar?
Casas de las islas orientales
Respecto a Gran Canaria, destacan las viviendas labradas en la toba que indican la afluencia de culturas posteriores. También se encuentran casas de muro y con plantas cruciformes y de otros tipos. Hay bellas decoraciones geométricas en blanco, rojo, ocre, gris y negro. El ajuar de estas casas es muy rico: cerámica pintada, trituradores, molinos giratorios, pintaderas, tejidos vegetales, enseres de piedra tallada y utensilios de hueso.
En Lanzarote nos encontramos con un tipo de casa muy peculiar: «La casa honda», que es una cueva subterránea aprovechando el terreno volcánico del «malpaís». Frecuentemente consta de una boca de entrada y otra de salida. La altura de estas casas es muy pequeña, de 1 a 1,3 metros, por lo que la vida en ella se desenvolvía en cuclillas. También existían casas de superficie.
Ya en esa época, los antiguos pobladores adornaban sus hogares con muebles, aunque de carácter bastante rudimentario. ¿Cómo era este mobiliario?
El mobiliario de las viviendas de las islas occidentales era elemental y formado de piedra. No se conoce ningún mueble de madera. De madera conocemos los cayados, bastones y armas arrojadizas, así como algunas vasijas al estilo de las de cerámica.
En torno al hogar, en la parte más iluminada y exterior de la cueva, solían colocar varios asientos de lajas. También se suelen encontrar en un lugar más recogido de la cueva en forma de círculo. Como mesa se utilizaba una gran laja, colocada sobre un amontonamiento de piedras. Para colocar las vasijas y otros utensilios, a modo de estantería, se aprovechaban las repisas naturales de la cueva.
Las camas estaban formadas por un murete de piedra seca en la parte de la cabeza, de los pies y de un costado, siendo el otro, la pared natural de la cueva. El espacio para tumbarse iba relleno de una primera capa de «cascajo» o piedra menuda, que se recubría de una segunda capa de hierbas secas.
Los asientos se cubrían de pieles y también de pieles eran las sábanas o mantas para cubrirse en la cama.
En Gran Canaria, como consecuencia de culturas posteriores, se enriquece el ajuar y el mobiliario. Se construyen biombos de caña y esteras de palma.
Recipientes de madera.
¿Cómo enterraban a los muertos? ¿En las mismas cuevas donde vivían?
En cuevas semejantes a las habitadas se depositaba a los muertos. Estas cuevas sepulcrales suelen estar en la zona más alta del acantilado, en lugares casi inaccesibles, o bien en el extremo de los barrancos, lejos del poblado. Tales cuevas eran utilizadas muchas veces para distintos cadáveres. Éstos pueden estar o no momificados; lo que parece depender de la categoría social del muerto.
Hay que citar, como elementos constructivos funerarios de culturas posteriores, los túmulos en Gran Canaria. Los hay de un piso o formando graderíos. Los más simples forman un amontonamiento de piedras troncocónico. Los más complejos tienen gradas y torreones. El cadáver se coloca en una cista debajo de la tierra. Algunas veces cubierta de lajas. En otros casos, como en el Cascajo de Las Nieves (Agaete), en lugar de una cista, se encontró un ataúd de tronco de pino.
Este tipo de enterramiento aparece especialmente en la costa y asociado a las viviendas con plantas cruciformes, cuadrangulares, etc.
Ataúd de madera. Maipez de Abajo, Agaete.
Además de las cuevas habitación y sepulcrales, ¿qué otras construcciones realizaban los antiguos pobladores guanches?
Tagoror.—Construcción de planta circular u oval, rodeada de un pequeño muro de piedra seca. En su interior se reunían los ancianos o consejeros del jefe para deliberar sobre cuestiones políticas o de justicia. El mejor conservado, actualmente, es el de El Julan, en El Hierro. En los momentos festivos o solemnes se solía adornar con ramas y flores.
Taro.—Es una construcción también circular, que no tiene más de dos metros de diámetro. Es voz aborigen de uso actual. El fin de su construcción parece ser refugio de pastores, lugar de vigilancia o «torre de curiosos». Según Álvarez Delgado, la voz tarute, citada por los cronistas como mensajero, embajador, nuncio..., equivale literalmente a torrero, avisador, mensajero. Este tipo de yacimiento se encuentra en varios sitios de Tenerife y de El Hierro.
Efequén.—En Fuerteventura, templo o lugar destinado al culto. Parece ser que se trataba de dos muros concéntricos con entrada principal. En el centro figuraba la imagen del dios y allí se hacían ofrendas de manteca y leche.
Almogaren.—Templo edificado en piedra en Gran Canaria. Eran famosos el de Tirma y el de Umiaya, en la Caldera de Tirajana. Hoy día se conserva bastante bien el de la Montaña de Tauro, con tres dependencias (25).
Agadires.—Se trataba de graneros colectivos que perdura en Gran Canaria. Ejemplo de esto es el famoso Cenobio de Valerón, que hasta hace poco era considerado como una especie de convento femenino.
«Queseras».—Sigue siendo un misterio la función de esos canales trabajados en la roca que aparecen en Lanzarote. Se les suele considerar como lugar de ritos religiosos, donde se derramaba leche. Otros han visto un medio para apresar el agua, pero esto no es adecuado teniendo en cuenta que están abiertos por los extremos. Otros han pensado en lugar de trabajo en común. Pero nada de esto es claro. Sabemos que en el N de África, concretamente en Marruecos, abunda este tipo de construcción y tampoco se conoce su significado (7).
Maretas.—Es otra construcción destinada a la recogida de las aguas pluviales.
Queseras. no se sabe la función que tenían estos canales en la roca(Lanzarote).
Utensilios y técnicas relacionadas con la cocina y los alimentos
¿Cómo era la cocina?
El fuego es el medio más básico en la cocina. Pero el cocinar no tenía muchas complicaciones. Se asaba ligeramente la carne, que se comía casi cruda. Para este efecto tampoco se necesitaba más instrumental que el propio hueso de donde pendía. Seguramente se guisaría o se asaría el pescado y se calentaría la leche. Esto último no muchas veces, sabiendo el agrado de muchos pastores de tomar la leche recién ordeñada, con su calor natural. Para los frutos, semillas y moluscos no hay necesidad del fuego. Los problemas «culinarios» estarían más bien en la obtención del gofio, de la manteca, de la leche, del queso y de la miel de mocán, que tienen la ventaja de ser todos alimentos conservables y que se toman en frío. Por lo tanto, era sencillo el trabajo de la cocina, a no ser la posible realización de algún guiso.
¿Cómo obtenían el fuego?
El fuego se obtenía frotando un trozo de madera liviana con otro más duro y fijo, al que se le acercaban hierbas secas en el momento de prender. No tenían necesidad de hacer siempre fuego, pues lo conservaban en brasas o rescoldo. El «fogal» suele estar a la entrada de la cueva.
Los guanches frotaban dos trozo de madera para obtener el fuego.
En esta sociedad aborigen, ¿existían las lámparas?
Para iluminarse en el interior de la cueva habitación disponen de lámparas de barro, alimentadas probablemente con grasa animal. Este tipo de lámparas se conserva en los museos.
Las de La Palma y La Gomera podían suspenderse del techo, pues tienen orificios en los extremos. No así las de Tenerife.

Lámpara de barro.
En las cuevas sepulcrales y en los desplazamientos nocturnos utilizaban hachones de tea.
¿Qué utensilios empleaban en la elaboración de los alimentos? ¿De qué técnicas o instrumentos se valían?
Aunque se conocían las habas y el trigo, la cebada era lo que más se usaba. Se tostaba y luego se molía, obteniéndose así el gofio.
Tostadores y molinos
Para ello se precisaban utensilios para tostar y moler. De esta manera están los tostadores y molinos que se han conservado hasta nuestros días. Hay dos tipos de molino. Uno típicamente neolítico, en el que se muele el grano machacándolo como si fuese un gran mortero. Es poco frecuente en las islas. De El Hierro se conoce una sola pieza labrada en basalto cavernoso, pero carece de machacador. En cambio, morteros propiamente dichos abundan en Gran Canaria, como se puede apreciar en el Museo Canario. El segundo tipo de molino es el giratorio. Éste sí que se extiende por todo el Archipiélago.
El molino giratorio se compone de dos piezas de piedra, generalmente de lava porosa, de las que una va en el suelo, teniendo forma circular y un poco cónica, y la otra, en la parte superior, que es la que gira. Ésta, en su cara externa, tiene excavados algunos hoyuelos, donde en los modelos más primitivos se colocaban los dedos para imprimir el movimiento y, en los más avanzados, se metían unos palos, que hacían de mangos, para facilitar la rotación de la muela superior. Normalmente suelen ser uno o dos palos, pero es interesante constatar cómo en Lanzarote y Fuerteventura los molinos alcanzan mayor diámetro y van provistos de tres o cuatro mangos, fruto de un mayor uso colectivo y familiar. La muela superior del molino tiene un orificio central para introducir el grano y algunos tienen labrado un saliente circular que hace de embudo para depositar el grano que va descendiendo en la medida en que se va moliendo.
Molino de mano realizado en basalto.
¿Cómo elaboraban la manteca de leche? ¿Utilizaban algún utensilio en especial?
Odres Para La Manteca De Leche
Añaterve, mencey de Güímar, obsequia al conquistador Fernández de Lugo con 12 cuencos de manteca, 12 quesos añejos, 12 quesos frescos, 12 odres de leche y 12 cueros de cebada. Por lo tanto, el queso y la mantequilla constituían parte de la dieta guanche, si bien los datos tenidos respecto de esta manteca hablan sólo de su uso medicamentoso en inflamaciones, friegas, dolor de muelas, etc., y especialmente en las prácticas de embalsamamiento. Ello no es dificultad para pensar que también pudiera tener un uso alimentario.
La manera de elaborar esta manteca consistía en llenar de leche hasta la mitad un odre de piel, que lanzaban, como si fuera una pelota, dos mujeres, distanciadas entre sí ocho o diez pasos, hasta ir separándose la grasa. Este procedimiento persistía en el Sur de Tenerife hasta no hace mucho tiempo, con la diferencia de que el odre se colgaba del techo y luego le imprimían movimiento dos personas de un lado y otro (18).

Cuenco de madera de Tenerife.
Como podemos observar por el obsequio de Añaterve, los odres de piel no sólo eran usados para la elaboración de la manteca, sino también como medio de contención y transporte de leche, cebada y otros productos.
Además de estos utensilios para elaborar los alimentos, los guanches desarrollaron otros especialmente destinados a contener líquidos. Así surgió la cerámica. ¿Qué peculiaridades presentaba?
Los alimentos, especialmente los líquidos, necesitan de recipientes que los contengan y conserven. Éstos pueden ser de piel, como los odres citados. Pueden ser también de madera. En Canarias encontramos, en los museos, vasijas talladas en madera, pero su uso es menos frecuente, su realización se hace difícil y no pueden ser utilizadas al fuego. Por eso, el tercer material es el barro cocido. De él se elaboran vasijas y cuencos de distintos tamaños y con distintos fines.
Podemos hablar de grandes vasijas para el almacenamiento de agua; otras, de tamaño mediano, para guardar lo recolectado o para poner la leche al fuego, etc. De tamaño mediano son también los cuencos para el ordeño y los usados para la recogida de agua en charcos o manantiales.
¿Cómo el hombre, en general, descubrió la cerámica?
cerámica decorada de La Palma.
La cerámica apareció en el momento en que el hombre descubrió la capacidad de endurecimiento de la arcilla mediante la acción del fuego. Esto fue en el Neolítico, con la vida sedentaria dedicada a la agricultura y al pastoreo. Los hallazgos cerámicos más antiguos en el mundo pertenecen al milenio VI a. de C., en Palestina. Cada cultura neolítica va formando su propio estilo cerámico, que se propaga y se mezcla con las culturas de otros pueblos. Por ello, el estudio de la cerámica es un buen medio para conocer las inmigraciones y las influencias culturales que ha recibido un pueblo en las distintas épocas.
¿De qué fecha datan las cerámicas más antiguas de Canarias?
La cerámica más antigua de Canarias es de fondo cónico, generalmente lisa o con una decoración muy simple, de segura procedencia del Magreb (Argelia, Marruecos y Túnez) y de las regiones situadas al N. del Sahara. Esta cerámica (fechada en el 2500 a. de C.) llegó a las Islas, más tarde, con los primeros pobladores, y es la que se conservó en Tenerife sin otras aportaciones hasta el siglo XV (llegada de los conquistadores). Mientras que la cerámica de fondo esférico, no existente en Tenerife, es de procedencia sahariana y de fecha más tardía, lo que implica inmigraciones posteriores. En La Palma hay cierta cerámica que guarda paralelismo con la cultura del Bronce Atlántico. Todo ello indica el valor que tiene la cerámica o cualquier elemento material para reconstruir el pasado.
La cerámica canaria, como se ve, está relacionada con distintas áreas y épocas, pero también hay que señalar que un tipo importado puede ser modificado para adaptarlo a las circunstancias propias del país. Esto es lo que se observa en Tenerife en las vasijas con mango vertical, que ha sido una elaboración propia para adaptarlo a la recogida de agua de los charcos.
Según islas, la cerámica muestra unas características determinadas. ¿Cuáles son?

Cerámica de Tenerife con mango vertedero.
Sistemas de trabajo y subsistencia
SISTEMA DE TRABAJO
El guanche es fundamentalmente pastor. Eso no quiere decir que no se dedique a pequeñas tareas agrícolas o pesqueras. También hay individuos que tienen trabajos especiales como pueden ser los sacerdotes, embalsamadores, artesanos, curanderos, etc. En Gran Canaria se acentúa la especialización de trabajos y oficios por tratarse de culturas más avanzadas que llegaron a la isla.
EL PASTOREO
El cuidar de los ganados de cabras u ovejas les llevaba la mayor parte del tiempo. Las ovejas parecen ser de un tipo africano sin lana.
Cada rey (mencey o guanarteme), tenía su región, que era tierra común para todos los súbditos. En Tenerife y La Palma, en los veranos llevaban el ganado a la cumbre. Allí tenían sus refugios, en donde todavía se pueden encontrar vasijas y otros utensilios que muchas veces guardaban entre grietas de las propias cuevas. 
Zonas de pastoreo
De acuerdo con las características de las distintas zonas se establece un tipo de movilidad o permanencia; por ejemplo, si nos fijamos en la Isla de Tenerife podemos observar las siguientes zonas pastoriles:
1) Zona de permanencia en el invierno (Toda la costa norte).
2) Zona de permanencia anual (En el Este, Anaga, y en el Oeste, Teno).
3) Zona de continua trashumancia (Todo el Sur).
4) Zona intermedia para pasar desde la costa a Las Cañadas.
5) Zona de pastoreo de verano, en altas montañas (Las Cañadas del Teide). 
Aprovechamiento del ganado
Los guanches dedicaban la mayor parte de su tiempo en cuidar los ganados de cabras u ovejas. (PTF)
Del ganado se aprovechaban las pieles para vestirse, la carne y la leche. Hay datos que hacen suponer que fabricaban el queso, alimento práctico y duradero. También elaboraban con la leche la manteca o mantequilla, que usaban como alimento y uso medicamentoso.
Además de esta actividad principal del pastoreo, los antiguos pobladores también se dedican a tareas agrícolas. ¿Qué peculiaridades presentan? 

LA AGRICULTURA

Se dedicaban especialmente al cultivo de la cebada y del trigo. Hay teorías que consideran que desconocían el trigo. Hoy, por algunos documentos, se piensa que podían conocerlo. El hombre solía cavar y la mujer depositaba la semilla, debido al carácter fecundador que los antiguos pueblos solían darle a la mujer.
El trigo (Irichen) o la cebada (Tano) lo tostaban y luego lo molían con unas ruedas de piedra que hacían girar. Hoy se conservan muchos de estos molinos. La harina obtenida era el gofio o ahoren, sustento fundamental de la población canaria durante muchos años. Lo solían amasar con agua, leche, manteca o miel de mocán (yoya).
ANIMALES DOMÉSTICOS
Además de la oveja y de la cabra, tenían consigo cerdos y perros. Los colmillos de los cerdos aparecen en cuevas sepulcrales. Parece indicar que el cerdo tuviera un carácter sagrado. Posiblemente también se alimentaran de carne de perro castrado. Uno de los significados que se suele dar al nombre de Canarias es, precisamente, tierra de canes, es decir, de perros. Seguramente por la abundancia de estos o por el uso de tomarlos como alimento.
Cochino negro canario. (MC)

El perro Bardino o Majorero, es un perro de ganado prehispánico, difundido desde muy antiguo por todo el Archipiélago. De él se deriva el Presa Canario: se le denomina también «perro basto» y «verdino» (ejemplares de capa atigrada), de tipo molosoide, originario de las islas de Tenerife y Gran Canaria. Fue esencialmente el resultado de cruces del Bardino o Majorero, perro oriundo de la isla de Fuerteventura, y perros molosoides llevados a las islas. Su ardiente temperamento lo heredó de su antepasado el Bardino o Majorero, rústico, bregador y de fogoso carácter. Dichos cruces dieron como origen una agrupación étnica de presa de tipo intermedio y predominante, de color atigrado (abardinado) o leonado, y ambos manchados en blanco. Es un perro de talla media, de perfil recto. De aspecto rústico y bien proporcionado. Cabeza maciza, de aspecto cuadrado y cráneo ancho. Cuello cilíndrico, fuertemente musculado y cubierto por piel gruesa, despegada y elástica. Ligera papada. Pelo corto, sin subpelo, que presenta cierta aspereza. Su aspecto denota potencia. Mirada severa. Especialmente dotado para la función de guarda, defensa y, tradicionalmente, para la conducción de ganado vacuno. De temperamento impetuoso. Hábil luchador. Ladrido grave y profundo. Es manso y noble en familia y desconfiado con los extraños. En el pasado se le utilizó especialmente como perro de lucha.
¿Empleaban alguna técnica especial cuando pescaban?
Principalmente solían aprovechar los moluscos. En algunas de sus cuevas todavía llama la atención la presencia de las conchas o caparazones de lapas o «burgados». Las conchas de las lapas las solían utilizar como cucharas.
Los de las islas orientales sabían nadar. Los de Tenerife parece que no nadaban, pero sí pescaban utilizando anzuelos que hacían de cuernos de cabra. Restos de «morena» y otros peces se han podido encontrar en las cocinas de sus cuevas. Otra técnica utilizada en la pesca era adentrarse durante la noche en el mar, armados de teas encendidas y garrotes, dando muerte a los peces que encontraban. Esta técnica era empleada en las islas orientales, donde sabían nadar. También se utilizaban redes de junco. Es muy probable que también matasen a los peces estancados en los charcos, echándoles leche de tabaiba o cardón, como todavía es costumbre, cogiéndolos luego con las manos («embarbascar», se llama a esto).
Diferentes especies de conchas de moluscos. (PTEH)
¿De qué se alimentaban los guanches? ¿Qué productos constituían la base de su dieta alimenticia?
Además de las carnes de oveja, cabra, cerdo y perro, aparte del gofio, leche, queso y mantequilla, aparte de los pescados y moluscos, tomaban frutas silvestres como hongos, madroños, bicácaros, dátiles, moras de zarza, mocanes, higos y semillas.
No parece cierto que el cultivo de los higos haya sido importado por los mallorquines, pues existían higueras antes que éstos estuvieran en 1346.
Conocemos, por los resultados de un análisis del contenido intestinal de la momia de un adolescente, que tomaban semillas de pino. En el análisis se aprecia también granos de cebada y harina de rizomas de helechos.
 
¿ALIMENTACIÓN POBRE?
Algunos han comentado esto, pero no parece ser cierto. Es claro que siempre han existido épocas de hambre, pero de ahí a considerar como pobre la dieta del guanche va mucho. Con los datos que tenemos, podemos considerar que la dieta es rica y variada. Se comía carne de cabra en abundancia y los viajeros lo testifican quedándose asombrados de la cantidad consumida. A esto hay que añadir el gofio, la leche, el queso, los moluscos y pescados, la fruta y la miel. Era una dieta variada y sólida.
El gofio era el pan de los guanches y de la población canaria actual. ¿Cómo lo elaboraban?

Utensilios y técnicas aborígenes: instrumentales y laborales
El animal se adapta y vive en su medio ambiente con los recursos naturales que el medio le ofrece. El hombre por su inteligencia, modifica y perfecciona lo que le rodea para mejor vivir. Esto es lo que hace que el hombre sea un ser «técnico». Técnico, porque utiliza unos medios para conseguir unos fines. Algunos de estos medios y fines los indicaremos al hablar de la subsistencia, las construcciones, los trajes y adornos, etc. Aquí tratamos ahora de precisar los instrumentos básicos con que obtenían estos fines y otros fines que iremos señalando.
El hombre guanche, perteneciente a una cultura neolítica, aislado por el mar, sin existencia de metales ni de grandes recursos naturales, ¿qué medios o utensilios emplea para sobrevivir y desarrollar su existencia?
La técnica de la piedra
Para modificar la naturaleza hay que utilizar medios que la propia naturaleza proporcione. Para matar los animales, para cortar las carnes y las pieles; para afilar los huesos, trabajar la madera; para hacer piezas de piedra como molinos, morteros, etc.; para construir y transformar nuevos medios, se necesitan unos instrumentos básicos, unos instrumentos duros, cortantes y que estén al alcance del hombre. Y estos instrumentos son las piedras, por eso se denomina a la época más antigua del hombre Edad de Piedra. Más adelante, el hombre encuentra otro tipo de material más escaso pero más apropiado, que revoluciona toda la técnica y éste es el metal. Pero el metal no existe en las islas y el hombre canario tiene que desarrollar su técnica con la piedra.
Lascas y obsidiana
Las lascas que proporciona la propia naturaleza y las que él talla y pule van a servir de cuchillos, hachas, raederas, raspadores, etc. El material es preferentemente de basalto y obsidiana. El sílex, material más fácil de tallar y más utilizado por los pueblos prehistóricos, falta en Canarias. La obsidiana es muy negra, brillante, de tipo vidrioso y con reflejos metálicos. En Tenerife es donde más se utilizan los instrumentos de este material volcánico que los guanches denominaban tabona y que por este nombre se entendió luego los instrumentos cortantes de piedra, como cuchillos, hachas, etc.
Lascas de obsidiana.
¿Cómo eran sus cuchillos? Además de estos elementos cortantes, ¿desarrollaron otro tipo de instrumentos?
Forma de los cuchillos
Las formas que tienen suelen ser atípicas, es decir, que no se someten a una forma determinada, aunque abundan con figura de corazón o de amígdalas. Se encuentran en abundancia en las cocinas, en los concheros y, los mejores ejemplares, en las cuevas sepulcrales como ofrendas funerarias.
En las islas orientales aparecen con forma menos tosca. Podemos citar los tafiques de Lanzarote, cuchillos de piedra en forma de media luna, con buen filo. También en las islas occidentales, sobre todo en La Gomera y El Hierro, se encuentran grandes cuchillos de forma prismática con una de sus aristas bien preparada para el corte. Algunos tienen una punta muy afilada. Se supone que se emplearían para el sacrificio de los animales, aunque también pudieran ser utilizados como armas. Sin embargo, existen en Gran Canaria unas hachas muy pulimentadas de cloromenalita que tanto por el material como por la técnica hay que considerar extrañas a las islas y, por consiguiente, de importación.
Percutores, mazos y pulidores
Aparte de los cuchillos y hachas, hay que citar otros instrumentos líticos como los percutores y mazos para golpear y trabajar la piedra, los pulidores para suavizar superficies y que suelen ser de basalto o de lava muy porosa.
Con este instrumental básico podían trabajar sobre la carne, las pieles, la madera, los huesos y las mismas piedras. Con él pueden cortar, romper, machacar, escarbar, pulir...
Hacha de piedra pulimentada neolítica.
¿Necesitaron inventar alguna herramienta para llevar a cabo sus labores de pastoreo, agricultura y pesca?
Utensilios relacionados con el trabajo
Para el pastoreo no se precisa ningún utensilio especial. Tan sólo el cayado del pastor que solía ser largo, terminado en punta o en horquilla y reforzado en la parte inferior por un cuerno de cabra, tal como se observa en las armas encontradas en la cueva del Campanario (Guía de Isora, Tenerife) (17).
En la agricultura empleaban también los cuernos de macho cabrío para arar la tierra a mano.
Para la pesca utilizaban anzuelos de astas de cabra. En Lanzarote entretejían los juncos para formar amplias redes a las que colocaban pesas de piedra para asegurar su estabilidad inferior. Con ellas recogían los bancos de peces, que espantados, eran conducidos por hombres y mujeres, azotando el agua con varas, hasta las redes situadas en la costa.

Los cuernos de cabra los utilizaban los guanches para fabricar útiles para la agricultura.

Organización familiar y costumbres
¿UNIDAD DE COSTUMBRES?
En este sentido, como en tantos otros, hay diferencias entre cada una de las islas, a pesar de que existan características comunes por esa «cultura de sustrato», semejante en todas ellas.
La «cultura de sustrato» o arcaica más pura se observará precisamente en Tenerife y La Gomera por haber sido las menos afectadas por las posteriores inmigraciones. Eso no significa que las culturas de ambas islas sean idénticas, pues aunque tengan un tronco común se encuentran ciertas diferencias raciales y culturales. Sabemos que actualmente el tipo cromañoide existe en las dos islas, sin embargo el tipo gomero es más pequeño, más moreno, con ojos y cabellos menos claros que el de Tenerife. En el aspecto cultural también existen diferencias. En este sentido, los cromañoides tinerfeños (gente de la montaña) se parecen mucho más a los cromañoides de Gran Canaria (también de la montaña), tanto racialmente como culturalmente. Sin embargo, había elementos comunes y semejantes en todas las islas: los molinos de mano, el tagoror, la cerámica de fondo cónico, las viviendas en cuevas, el tratamiento de las pieles, el gofio, el lenguaje, etc. Todo ello evidencia un fondo común, una cultura basal o de sustrato generalizada en todo el Archipiélago y que responde a la cultura más antigua.
¿Existía el concepto de familia en La Gomera?
Antiguos habitantes de la isla de La Gomera.
¿LO MÁS ARCAICO EN LA GOMERA?
No resultaría extraño pensar que la cultura de La Gomera respondiera a las inmigraciones primeras y más arcaicas que se dieron en el Archipiélago y que, así como hoy se muestra como la más aislada y conservadora de la tradición, entonces, libre también de contactos importantes, mantuviera esas costumbres primeras y menos organizadas. Así, en el caso del matrimonio, se dice que hombres y mujeres iban desnudos, sin avergonzarse, que la familia apenas existía, que las relaciones sexuales se daban cuando surgía espontáneamente. Por lo tanto, las mujeres eran comunes y eran cedidas sin celo alguno, teniendo como cortesía ofrecer el lecho de sus mujeres a sus huéspedes, tal como se cuenta de los esquimales (8). Sin embargo, esta «hospitalidad de lecho», probablemente se daba en más islas. Un hecho concreto lo tenemos en Lanzarote (Zonzamas ofrece a Avendaño como hospitalidad de lecho a su mujer Fayna, de donde nacería Ico). Ésta es la opinión de Álvarez Delgado.
Se dice que en Lanzarote existía la poliandria, es decir, varios hombres para una sola mujer. ¿Cómo se sostenía este tipo de relación?
POLIANDRIA EN LANZAROTE
Según las crónicas de Bethencourt (12), cada mujer poseía tres maridos y cada uno de ellos tomaba la función de tal durante un mes y los otros dos meses como colaborador en el trabajo. Al ser una isla pobre, la poliandria viene a ser un medio para evitar la superpoblación y aumentar los recursos familiares.
En el aspecto de las costumbres, probablemente existirían también muchas cosas en común y también, por supuesto, diferencias a causa de las distintas oleadas de gentes y culturas, y a causa de las circunstancias de cada isla.
¿En ninguna isla existía el matrimonio monogámico?
EL MATRIMONIO MONOGÁMICO
La pareja hombre mujer es lo más común en el resto de las islas. En Tenerife y Gran Canaria era por elección de ambas partes. En El Hierro, el hombre elegía a la mujer y le regalaba algunas cabezas de ganado al padre de la novia. En La Palma, el matrimonio era respetado y constituía el fundamento de las relaciones sociales.
A pesar de que todos los autores insisten en el matrimonio monogámico en Tenerife, el Padre Espinosa señala que «tenían tantas mujeres como podían» (22). Hay que decir que, en la actualidad, en muchas culturas predomina el matiz monogámico, aunque existe la posibilidad de que un hombre tenga más de una mujer.
La gordura era signo de salud y de preparación para ser madre. Esto ocurría en la isla de Gran Canaria. ¿Cómo era exactamente esa costumbre?
ENGORDAMIENTO Y DERECHO DE PRELIBACIÓN EN GRAN CANARIA
Cuando era concertado el matrimonio, la novia permanecía en casa de sus padres, acostada, recibiendo toda clase de manjares durante un mes, a fin de presentarse con toda la gordura posible al matrimonio, ya que era motivo de belleza y, sobre todo, condición para engendrar hijos robustos (1).
El matrimonio se festejaba con banquetes y bailes. Asistía el guanarteme, quien tenía el derecho de acostarse la primera noche con la novia y si no, se lo cedía a algún guaire (consejero). Este derecho de prelibación o de pernada subsistía en varios pueblos europeos durante la Edad Media.
¿Existía el divorcio entre los guanches?
DISOLUBILIDAD DEL MATRIMONIO EN TENERIFE
Los cronistas señalan que con la misma facilidad que los guanches tinerfeños contraían matrimonio, con esa misma facilidad podían romper sus relaciones matrimoniales. Esto ocurría tanto por parte del marido como por parte de la mujer, si no había entendimiento entre ellos. Pero los hijos de ese matrimonio eran considerados como ilegítimos. Si era varón, se le denominaba achicuca y si hembra, zucaha. Se puede observar que el perjuicio que cae sobre los hijos es un mecanismo social que hace de freno para impedir la fácil separación de la pareja. Aunque más que el concepto de hijo ilegítimo, opina Álvarez Delgado, supone el concepto de hijastro, de hijo no correspondiente al mero matrimonio.
¿Se podían casar entre familiares?
LIMITACIONES DEL CASAMIENTO POR PARENTESCO
La unión se podía hacer con cualquier mujer, excepto con la madre y la hermana. Sin embargo, en el caso de los reyes, se llega a permitir el casamiento con hermanas. Un ejemplo de ello lo tenemos en Lanzarote donde el príncipe Guanarame se casa con su hermana, la princesa Ico.
El papel de la mujer en este tipo de sociedad era relevante. ¿Cuáles eran sus funciones principales?
PAPEL PREPONDERANTE DE LA MUJER PALMERA
Se suele señalar que en esta isla había mujeres amazonas, es decir, mujeres guerreras y valientes o que llegaban a detentar un poder político. Veamos algunos ejemplos: a la hermana de Zuguiro y Garehagua, apresada en el término de Tigalate (Mazo) por los herreños, tuvieron que apuñalarle los pechos y darle muerte para defenderse de su bravura. Otro tanto pasó con Guayanfanta, en Aridane, mujer hermosa, de cuerpo gigantesco y de gran bravura, que se enfrentó con los cristianos herreños cuando trataban de acosarla, derribando a uno que le perseguía y tomándolo bajo el brazo, estuvo dispuesta a arrojarse con él al precipicio, pero los otros herreños lo impidieron rompiéndole ambas piernas (53).
Azurara también comenta cómo en una captura de palmeros llevada a cabo por portugueses, se apresó a una mujer «que era de talla extraordinaria para una mujer y de la cual se decía que ella era la reina de una parte de esta isla» (8). Torriani también indica que «las mujeres iban por delante de los hombres en los combates y peleaban virilmente, con piedras y varas largas» (51).
Aunque el poder de la mujer ha sido un hecho muy corriente en las culturas agrícolas, está mucho más acentuado en la isla de La Palma.
¿Qué costumbres se tenían con los hijos cuando éstos eran pequeños?
LOS HIJOS
A modo de bautismo
Cuando nacía un niño era costumbre que viniera una mujer encargada de echarle agua en la cabeza. Esto se llegó a ver como una especie de bautismo, pero ello es una práctica muy antigua.
Amamantamiento
Llamó la atención a los cronistas las mujeres lanzaroteñas, que con falta de leche en sus pechos, daban a chupar a los niños el labio inferior, considerando que por este motivo lo tenían muy desarrollado. ¿Le proporcionarían la leche de oveja o de cabra a través de la boca?
Adiestramiento físico
Los niños eran adiestrados desde muy pequeños en ejercicios de saltos, luchas, carreras, etc.
En La Gomera, especialmente, aprendían a tirar y a esquivar pelotitas de barro, luego piedras, después dardos sin puntas. La puntería para tirar piedras y la habilidad para esquivarlas fue un arte de todos los canarios.
Modelos educativos
Los padres solían encauzar a los hijos en una buena educación presentándoles ejemplos de hombres de mala conducta que eran aborrecidos por todos y ejemplos de hombres de bien que eran por todos queridos.
Juguetes
Por los molinos y vasijas en miniatura sabemos que los niños tenían juguetes. Algunos de estos juguetes se han encontrado en Las Cañadas del Teide en Tenerife, lo que indica que toda la familia se desplazaba con el pastor en el verano. Pero en las sociedades primitivas los niños desde los siete años ya comienzan a responsabilizarse de las tareas de sus padres y esto es lo que también ocurriría con los niños guanches.

Vestimentas y ornamentos
TRAJES
«Tamarco»
Generalmente eran de cuero gamuzado, pues no conocieron el lino ni el algodón ni, posiblemente, la lana, pues aunque poseían ovejas, éstas pertenecían a una raza africana sin lana. El traje más importante es el «tamarco», que presenta dos tipos: uno corto, que cruza el brazo izquierdo y en diagonal cubre la mitad de la espalda y el pecho, y otro largo, que se ata en el cuello y cae casi hasta los tobillos. Este es el que usaban los pastores en la montaña para la defensa del frío. Se cree que en la parte inferior se le ataban algunas piedrecillas redondeadas que hacían de contrapeso para ofrecer mayor resistencia al viento. Las capas manteras de los campesinos de La Esperanza, en Tenerife, recuerdan en cierto modo tal tipo de tamarco.
Los vestidos solían colorearlos con hierbas y flores.
Los antiguos pobladores… ¿llegaban a conocer la costura? ¿Cosían las pieles?
Estos niños visten el tamarco corto, a pesar de que el tipo de piel no se corresponde con el usado en aquella época.
Confección
Las pieles son cosidas con correas o tripas de cabras por medio de agujas de espinas, pero especialmente con punzones de hueso de cabra. A modo de lezna de zapatero, se agujerea la piel y se introduce la cuerda. En las momias se puede apreciar la habilidad de estos cosidos.
En invierno, los pelos de la piel suelen ir hacia adentro y el otro lado se presenta muchas veces decorado con incisiones horizontales y verticales. El tamarco también se adorna con tiras de piel angulares y redondeadas que se superponen y se cosen al mismo (18).
Para la sujeción de los vestidos y otros fines se utilizan cordones y cuerdas trenzadas de fibras vegetales.
¿Los guanches siempre iban vestidos? ¿Admitían ir desnudos?
Poca ropa
En tiempo de lucha acostumbraban ir desnudos para una mayor agilidad. Fuera de esto solían cubrirse, aunque los lanzaroteños usaban una media capa que sólo cubría las espaldas. No así las mujeres que solían ir bien enfundadas. De todas maneras no es extraño, dado el clima de las islas y el carácter naturalista de los pobladores, que en verano y en la zona costera del Sur fueran más desnudos que vestidos.
¿Tenía alguna peculiaridad la vestimenta usada por los guanches de Gran Canaria?
Aparte de las características generales del tamarco, en Gran Canaria usan unos toneletes o faldas de junco o palmera, extraordinariamente tejidos, luego una especie de blusa y, encima, el tamarco. Así mismo, existen otras diferenciaciones en la vestimenta de cada isla.
Ya hemos hablado de las peculiaridades de la vestimenta de los guanches, pero… ¿qué otros elementos complementaban su vestimenta?
Tocado de la cabeza
A este respecto hay que señalar que cada isla ofrece una vestimenta peculiar. Si nos fijamos en el tocado de la cabeza, observamos que los de Lanzarote usan un bonete alto de piel; los de Fuerteventura, un bonete con tres plumas largas, y las mujeres, una faja de cuero de cabrito, teñida de colorado y adornada con las mismas plumas; los de Gran Canaria se encasquetaban un zurrón de cabrito cuyas garras caían por las orejas y que amarraban al pescuezo. Pero estos pintoresquismos señalados por los cronistas hay que considerarlos más propios de solemnidades o de las capas sociales altas.
¿Iban descalzos?
Calzado
Aunque se tiene constancia de que los guanches andaban la mayor parte del tiempo descalzos, conservándose esta costumbre hasta hace poco entre los más pequeños y hasta cierta edad, sí habían desarrollado un tipo de calzado para poder moverse mejor por la áspera orografía de las islas.
El calzado más generalizado era cuero de cabra que en Lanzarote y Fuerteventura llamaban «maho» y en Tenerife «xercos». Los nobles en Gran Canaria calzaban zapatos de pedazos de cuero de puerco que es más consistente. Es posible que este tipo de calzado fuese empleado más corrientemente en las demás islas.
En todos los pueblos primitivos, por sencillos que fueran, se usaban adornos. ¿También lo hacían los guanches?
Piel decorada.
ADORNOS
Se adornaban con collares. En Tenerife es la isla donde se han encontrado abundantemente collares de cuentas de barro. Otros adornos eran de conchas marinas o de huesos labrados y piedras pequeñas. Las vértebras de pescado, cuidadosamente trabajadas, también eran utilizadas como cuentas de collares. En Fuerteventura se encuentran unos collares de especial belleza, confeccionados con placas de hueso, de forma rectangular y perforados. Se adornaban también con colgantes de conchas. En la isla de La Palma se han descubierto colgantes de madera en forma de gota.
Aparte de estos utensilios, ¿cómo utilizaban las pieles?
Cuentas de collar.
UTENSILIOS DE PIEL PARA GUARDAR Y TRANSPORTAR OBJETOS
Aparte de los odres y cueros en la contención y transporte de la leche y la cebada, tal como citamos en la ofrenda de Añaterve a Fernández de Lugo, utilizaban zurrones de piel de cabra y bolsas de cuero gamuzado. El zurrón era especialmente empleado, tal como se ha conservado hasta nuestros días, para guardar el gofio después de haberlo amasado en el propio zurrón. En Lanzarote se utilizaba también un tipo de zurrón para guardar los dardos y otro más pequeño para las piedras arrojadizas. Además de los zurrones, parece que se empleaban unas bolsitas de cuero gamuzado como estuche de algunas menudencias.
¿Qué empleaban para trabajar las pieles o la cerámica?
UTENSILIOS RELACIONADOS CON LAS PIELES
Los utensilios de huesos son los que principalmente son empleados para coser las pieles. Tenemos los punzones, las espátulas y los portapunzones.
El punzón servía a modo de lezna; con él se hacía el agujero para pasar el hilo o la correílla. «Dada la facilidad con que se partía la punta del punzón, se afilaba de nuevo, tal como se hace hoy con los lápices. Para evitar las frecuentes roturas, se construían portapunzones de hueso, generalmente de cerdo, por su mayor resistencia» (14). El portapunzón es, pues, una especie de cubierta de hueso que refuerza el punzón.
Por lo que se refiere a las espátulas, hueso largo y aplanado con un agujero en un extremo, no se conoce bien su finalidad. Se encuentran especialmente en las cuevas sepulcrales. Por el agujero se debería pasar un cordel. ¿Serviría de adorno? Parece que pudiera haberse empleado «para doblar los bordes de las pieles y disponerlas mejor para el cosido».
Punzones.
UTENSILIOS RELACIONADOS CON LA ORNAMENTACIÓN
Para la decoración de la cerámica se utilizan también huesos, palillos, etc. En La Palma se usó un pequeño objeto de hueso, semejante al punzón, por un extremo aguzado y por el otro redondeado.

Fuente: GEVIC